El alcalde de Ixmatlahuacan Raúl Andrade González intenta desde ya, con el uso y abuso de recursos públicos, heredarle la presidencia municipal a su madre, Josefina González Cuevas, actual presidenta del DIF Municipal.
Su historia política y en el servicio público es breve. Simpatizante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), acompañó a Miguel Ángel Yunes Márquez de Acción Nacional (PAN) en su intento por hacerse de la gubernatura en 2018.
A pesar del descalabro electoral, en contraprestación operó la Tesorería del Ayuntamiento de Ixmatlahuacan con la alcaldesa del blanquiazul Guadalupe Serrano Amaya (2018-2021). Desde esa posición empujó su candidatura a la alcaldía en 2021 bajo las siglas del desaparecido Partido Unidad Ciudadana de Cinthya Lobato Calderón.
Ya instalado como presidente, se convirtió en morenista con el respaldo desde Palacio de Gobierno durante los últimos años.
Aunque pareciera que ya acumuló muchos beneficios, para Raúl Andrade aún se quedan cortos para lo que dio a MORENA en la elección del año pasado. Por eso ahora busca heredar la silla a su madre, la presidenta del DIF Municipal, Josefina González, abanderada por los morenos.
Pero por si la cosa no le sale, hay un plan B. El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ha presentado a Guadalupe Serrano Amaya (sí, la que en 2018-2021 ya fue alcaldesa de ese lugar con el PAN y que lo llevó como tesorero) como su aspirante a la presidencia en la coalición que mantiene con MORENA. Y de paso empuja a su candidato en el Partido del Trabajo (PT), Arturo Castillo Chávez, incrustado en la nómina municipal en el área de Protección Civil.
En su intento por colar a su madre, o a su amiga, no va sólo, le ayuda el diputado local de su distrito, Felipe Pineda, quien anda decidido a sumar alfiles a los municipios, así sean del PAN, de donde salió y prefiere ocultar para no despertar el malestar de los mandones en Palacio de Gobierno.
Vaya historia de nepotismo.
